Lo que deben saber acerca de la gestión de riesgos en proyectos de construcción

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Debido a la complejidad de los proyectos de construcción que, usualmente, involucran múltiples partes interesadas, regulaciones estrictas y condiciones variables, la identificación y manejo adecuado de los riesgos es crucial para evitar problemas que no solo afectan a los clientes sino a las empresas a cargo, entre los que destacan los retrasos, sobrecostos, problemas de seguridad e, incluso, la paralización de la obra. Es por ello importante contar con expertos en gestión de proyectos de construcción, como los que conforman a Meprosa Construcciones.

¿Por qué es importante una buena gestión de los riesgos en la construcción?

La gestión de proyectos de construcción es clave para el éxito y, en esta, cobran mucha importancia los riesgos. Gestionar estos últimos es crucial para prever problemas potenciales antes de que ocurran, así como establecer planes de acción para mitigar sus efectos.

Consideran que los proyectos de construcción son en sí riesgosos, debido a múltiples factores, por ejemplo, las fluctuaciones del mercado, cambios en las normativas aplicables, condiciones ambientales impredecibles, así como la disponibilidad de materiales y mano de obra. Una excelente gestión de proyectos de construcción enfocada en los riesgos permite identificar estos problemas potenciales, evaluar su impacto y crear estrategias para manejarlos de forma segura y eficiente.

Además, la gestión de riesgos es crucial para no perjudicar los intereses financieros de todas las partes involucradas, garantiza la seguridad en el sitio de trabajo y permite que las empresas constructoras cuiden su reputación. La implementación de un enfoque proactivo hacia los riesgos en vez de reaccionar una vez que suceden puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso de los proyectos, ya sean naves industriales, obra civil, instalaciones deportivas, entre otros.

¿Qué tipos de riesgos hay en la construcción?

Los riesgos que consideran los expertos en gestión de proyectos de construcción son:

Riesgos financieros

Estos se relacionan con el costo del proyecto y pueden incluir sobrecostos inesperados, fluctuaciones en los precios de los materiales o problemas con el financiamiento. En caso de cambios en el presupuesto, es posible que todo el proyecto termine afectado y, sin una adecuada planificación, será difícil de manejar.

Riesgos contractuales

Se refiere a los problemas relacionados con los contratos, por ejemplo, disputas entre las partes, interpretación incorrecta de los términos o incumplimiento de obligaciones. Estos pueden generar retrasos y costos adicionales, por lo que se requiere una revisión detallada de los acuerdos e implementar cláusulas que prevean conflictos potenciales.

Riesgos laborales

Hacen referencia a la disponibilidad, competencia y seguridad de la fuerza laboral. Los accidentes en la obra, falta de mano de obra calificada o problemas con sindicatos pueden dificultar el avance del proyecto.  La seguridad en el lugar de trabajo es un aspecto clave de este tipo de riesgos.

Riesgos de impacto social y ambiental

Cualquier proyecto de construcción tiene un impacto en el entorno y las comunidades cercanas, lo que incluye problemas como la resistencia de la comunidad, la contaminación o la interrupción de las actividades locales. Sin un enfoque adecuado para manejar estos riesgos, ocurrirán conflictos y problemas legales que pueden anular por completo el proyecto.

Riesgos de disponibilidad de recursos

Estos se relacionan con la disponibilidad de materiales y equipos necesarios para el proyecto. La escasez de materiales o equipos defectuosos puede retrasar el cronograma del proyecto y aumentar los costos. Un buen plan de gestión de riesgos incluirá medidas para garantizar la disponibilidad continua de los recursos necesarios.

Etapas para enfrentar los riesgos

Una vez que se identifica la naturaleza de los riesgos, sigue la creación de estrategias para hacerles frente. Esto implica un proceso que se divide en las siguientes etapas:

Cuantificación del riesgo

Esta etapa implica un análisis exhaustivo de los posibles problemas que podrían surgir durante el proyecto. Es necesario que se evalúen tanto la probabilidad de que ocurra cada riesgo como su posible impacto en el proyecto. Dicha cuantificación brinda una base sólida para la toma de decisiones y permite priorizar los riesgos que requieren atención inmediata.

Elaboración de la respuesta

Una vez que se han identificado y cuantificado los riesgos, tienen que desarrollarse planes de acción específicos para cada uno, lo que incluye estrategias para evitar los riesgos cuando sea posible, mitigarlos si no pueden evitarse o transferirlos a otra parte (por ejemplo, a través de seguros o subcontratación). La elaboración de la respuesta igual abarca la asignación de responsabilidades y la creación de protocolos claros para manejar los riesgos en caso de concretarse.

Contingencia

Un error frecuente en la gestión de obras civiles y otros proyectos de construcción es no contar con planes de contingencia, que son indispensables para garantizar la continuidad del proyecto, inclusive si se presentan problemas inesperados. Es importante que los planes de contingencia sean detallados y se consideren todos los escenarios posibles, desde la falta de recursos hasta problemas financieros o laborales. Un buen plan de contingencia incluye aspectos como los recursos adicionales, ajustes en el cronograma y estrategias de comunicación para que todas las partes interesadas se mantengan informadas.

Si desean el respaldo de una empresa constructora con amplia experiencia en la gestión de proyectos y con la capacidad para construir cualquier tipo de obra, como las bodegas, contacten a los expertos de Meprosa Construcciones al +52 (668) 166 1137 o envíen un correo electrónico a la dirección: ventas@meprosaconstrucciones.mx.