Los puentes son pieza clave en la infraestructura de ciudades y áreas urbanas. Garantizan la movilidad y conectividad tanto peatonal como vehicular, disminuyen la congestión, fomentan el desarrollo económico y evitan problemas de seguridad vial. Para la construcción de muchos de ellos, es necesario realizar una cimentación, ya que esto asegurará un buen comportamiento de la estructura a lo largo de su vida útil. Los tipos de cimentaciones utilizados varían según las características del suelo, necesidades de carga, entre otros aspectos de obra civil. Se trata de dos tipos que vale la pena conocer, así como las especificaciones técnicas de su aplicación.
Importancia de las cimentaciones para puentes
Las cimentaciones son cruciales para proyectos de obra civil, incluidos los puentes. Es importante que se realicen adecuadamente y por ingenieros experimentados, ya que esto determina varios aspectos, como su estabilidad estructural, la transmisión de las cargas de los puentes al suelo de forma segura y la reducción de movimientos peligrosos. Las cimentaciones ayudan a soportar las cargas verticales de la estructura, así como las cargas laterales procedentes del tráfico y otras fuerzas.
Evitan diferencias en asentamientos capaces de derivar en daños estructurales y reducciones en la capacidad de carga de los puentes. Si se obtiene una cimentación duradera y adecuada al tipo de puente, este tendrá una larga durabilidad, disminuyendo la necesidad de mantenimiento y reparaciones. Cabe añadir que permite disponer los puentes de forma segura en zonas complicadas, por ejemplo, en entornos marinos.
Preparativos y proceso de cimentación
Antes de aplicar alguno de los tipos de cimentación, es importante que el terreno se desbroce y limpieza, asimismo, considerar aquellos componentes que conformarán la cimentación. Al cubrirse tales actividades, los ingenieros en obra civil ordenan la excavación requerida, en la que se consideran varios aspectos, por ejemplo, la estabilidad de dicha labor, las características del suelo y las alteraciones en la resistencia del terreno a causa de las precipitaciones pluviales.
En ciertos casos, puede requerirse una optimización del suelo mediante varios métodos, entre los que destacan el jet grouting, que consiste en una inyección a alta presión para romper roca suelo o el suelo, mezclarlo y sustituirlo de manera parcial por cemento u otro agente. Lo siguiente es efectuar un hormigonado de limpieza con un espesor aproximado de diez centímetros. El objetivo de esto es nivelar y limpiar el terreno para efectuar la cimentación.
Por último, al concluir la cimentación, es indispensable rellenar aquellas áreas de la excavación que no están ocupadas por los componentes estructurales (como los pilotes). Una vez dicho esto, toca mencionar los tipos de cimentaciones usadas por las empresas constructoras expertas en obras civiles como Meprosa para la construcción de diferentes tipos de puentes: cimentaciones profundas y superficiales. Las últimas se efectúan con losas y zapatas y las primeras se realizan con pantallas o pilotes. Veamos a continuación las particularidades de cada variante.
Cimentaciones profundas
Como mencionamos, se utilizan pilotes para aplicar este tipo cimentación, que igual suelen utilizarse para la construcción de naves industriales. Hay dos tipos de pilotes para puentes: excavados in situ e hincados. Estos últimos pueden colocarse por medio de vibración o de hinca con una maza. Con respecto a los materiales usados para su fabricación, destacan el acero, madera y concreto, además es posible prefabricados para agilizar el proceso. Por otra parte, los segundos se dividen en tres variantes:
- Pilotes barrenados.
- Pilotes perforados sin entubación.
- Pilotes con camisas metálicas.
Es importante que los ingenieros en obra civil tengan información clara y objetiva para aceptar el pilotaje, entre la que destacan los análisis sónicos. En este tipo de cimentación es posible la utilización de pantallas que, para ejecutarse, se requieren muretes guía colocados en los extremos en los que la pantalla será colocada. Posteriormente, se integra la ferralla y se aplica hormigonado. Con respecto al espesor de las pantallas, varía entre los 0.4 y 1.20 metros.
Ya sea que se aplique la cimentación con pantallas o pilotes, es indispensable efectuar un descabezado para que no quede concreto de baja calidad en la parte superior, asimismo, para que estén descubiertas las armaduras que se anclan en el encepado. Otra solución para este tipo de cimentación es la utilización de micropilotes metálicos, con orificios en el terreno donde se coloca un elemento de metal que se inyecta posteriormente para que los micropilotes estén en contacto con el suelo.
Cimentaciones superficiales
Cuando se aplica el hormigonado de limpieza, comienza la colocación de la ferralla, ya sea previamente preparada o efectuada in situ. Esto se realiza con ayuda de armaduras que evita el contacto entre armaduras y encofrados. Lo siguiente es la colocación de los encofrados laterales. Esto se hace de modo que no haya movimiento en los encofrados para eliminar problemas durante el hormigonado. Antes de realizar este último proceso, es importante corroborar la limpieza del encofrado para que las armaduras colocadas sean las adecuadas para el proyecto.
En Meprosa Construcciones no solo somos expertos en la construcción de naves y bodegas para las industrias, sino que tenemos la tecnología suficiente y el equipo adecuado para realizar proyectos de ingeniería civil como los puentes, asimismo, para aplicar tanto cimentaciones profundas como superficiales. Contamos con amplia experiencia y un largo historial de proyectos exitosos que pueden consultarnos.
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